domingo, 18 de marzo de 2012

Desde la humildad. ¡Va por ustedes!, por Salva Domínguez

Con la timidez y el nerviosismo típico del que pisa albero por primera vez con el fin de ponerle inicio a uno de sus sueños, formulo yo este texto, pero con otro aspecto en común, quizás más relevante que los anteriores: la ILUSIÓN.
Una ilusión alimentada porque este proyecto de aficionados prácticos taurinos va camino de fraguarse con todas las de la ley, gracias a la entrega y constancia de quien considero un gran amigo Rafael Ruiz, el gran Risquillo. Ese que con tan sólo una palabra es capaz de hacerte volver a soñar con cualquier sueño. Gracias también a Francisco Izquierdo “Chamanieto”, por la disciplina y la entrega de quien, y sin haber sido de renombre con el de las patas negras, a día de hoy considero mi Maestro, no sólo en esto del toro, sino en muchos más aspectos de la vida gracias a su madurez y a esa ilusión intacta como la del que empieza –de esto que afirmo lo pueden atestiguar y reafirmar el resto de mis compañeros-. “Chamanieto” o “Chama” –como solemos llamarle-, te hace sentirte torero, y además es capaz de llevarnos a respetar aún más una forma de vida y a respetar un animal inigualable, a pesar de los continuos ataques que se le brindan en la actualidad.



Qué contaros de las experiencias que llevamos vividas en el poco tiempo que llevamos quedando, entrenando y hablando de toros hasta la saciedad… Es sorprendente y admirable ver la evolución de los compañeros, yendo a más y lancear con la parsimonia de cual matador de toros que busca coronarse. Son tantas y tantas sensaciones que no hay espacio ni tiempo para poder hablaros de lo que es ya prácticamente una familia taurina.

Una cosa que me gustaría transmitiros es cómo hemos llegado a comprender que dentro mundo del toro hay gente grandiosa, humilde, que aman y respetan a su profesión teniendo como única moneda de cambio, su vida. Esta grandeza, y en menos tiempo que dura un tercio de banderillas, me la hizo comprender el pasado martes 13, José Muñoz, un señor que en un corto periodo de tiempo nos regaló una lección bordada en plata que para mí tuvo el carisma y la humildad que algunos quisieran tener para su bordado en oro.




Con él aprendimos el valor de la plata en una cuadrilla, la importancia de no sólo parear sino también la de lancear un toro en su justa medida, las diferentes formas de coger el percal,  y hasta aprendimos a embestirnos unos a otros “pensando en toro”. Gracias José, espero volver a verte vestido de torero, porque ese es tu lío.



Sin más, desde aquí animo a todo el mundo aficionado al toro que se anime a vivir esta preciosa experiencia, porque de verdad, créanme, merece la pena.

Salva Domínguez

3 comentarios:

  1. Me alegro Salva que te sientas tan a gusto, identificado e involucrado con el proyecto de aficionados prácticos. Llevas razón, es una experiencia preciosa y gracias a aficionados como tú lo estamos convirtiendo en una realidad mucho más amena y divertida para todos.
    Enhorabuena por la colaboración.
    Por cierto, lo de José Muñoz fue muy interesante. Mi agradecimiento también para él.

    ResponderEliminar
  2. Sin duda la fiesta es manifestación de sentimientos y el juego de la verdad más pura,bonitas palabras.Darle mi enhorabuena a esta gran iniciativa,en especial al Francisco,hacia tiempo que no sabia de él , regalo grandes tardes como novillero , fiel a su raza, su toreria y su ambición de no dejarse ganar la pela, aqui queda plasmado que la ilusión de CHAMANIETO es la misma de cuando empezaba, personas asi son las que necesita la fiesta.
    Mi más sincera enhorabuena

    ResponderEliminar
  3. Gran profesional el mencionado CHAMANIETO, profesores asi, son los que necesitan las escuelas taurinas.
    Un saludo

    ResponderEliminar